El Poder Judicial apuesta a la mediación como alternativa para resolver conflictos. Durante dos meses, más de treinta personas con formación previa en mediación, se capacitaron en estrategias para fortalecer el dispositivo piloto que ya demostró buenos resultados para acercar a las partes y promover negociaciones que permitan arribar al consenso.

La especialización se hizo a través de un convenio firmado entre la UBA y el Tribunal Superior de Justicia de Santa Cruz, destinada especialmente al personal judicial con formación previa en mediación, para lo cual, la Escuela de Capacitación y Perfeccionamiento Judicial, ofreció una modalidad de 60 horas de clases que se dividieron en seis encuentros en total. Los encuentros, de los que participaron más de treinta personas de toda la provincia, estuvieron coordinados por la responsable del Centro de Mediación y secretaria Civil ante el TSJ, Marcela Ramos. El primero fue dictado por Jorge Leoz Salort, del Programa de Actualización en Negociación y Resolución Alternativa de Conflictos del Departamento de Posgrado de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires.

El segundo módulo contó con la participación de Gustavo Fariña, Coordinador del Programa de actualización en negociación y resolución de conflictos (Facultad de Derecho, UBA) y para el último de los encuentros vino a la provincia el profesor en Ciencias Jurídicas y del área de métodos alternativos de abordaje de conflictos en la facultad de derecho UBA, Juan María Luce. En el Poder Judicial de Santa Cruz, la mediación funciona a partir de una prueba piloto desarrollada en Río Gallegos (Rawson Nº 496) a la que se sumó otra en Caleta Olivia (Hipólito Irigoyen N° 2245), que, poniendo como protagonistas a las partes, fomentando la comunicación y el dialogo, logró evitar la litigiosidad en el sesenta por ciento de los casos de que fueron derivados por juzgados de Familia. Una característica de este proceso es que también mostró que luego de alcanzar el consenso, el mismo resultó duradero, producto de del compromiso de las partes.

OTRA FORMA DE RESOLVER EL CONFLICTO

Comenzó la especialización en Mediación Familiar en el Poder Judicial

La actividad es posible gracias a un convenio firmado entre la UBA y el Tribunal Superior de Justicia de Santa Cruz, que en este caso está destinada especialmente al personal judicial con formación previa en mediación.  La especialización de la Escuela de Capacitación y Perfeccionamiento Judicial, a cargo del vocal Enrique Peretti y coordinada por Tania Valderrama, tiene una modalidad de 60 horas de clases, divididas en encuentros: los del 17 y 18 de marzo, y los que se realizarán el 7 y 8 de abril; y el 12 y 13 de mayo.  La inauguración del ciclo estuvo a cargo de la coordinadora del Centro de Mediación y secretaria Civil ante el TSJ, Marcela Ramos, quien dio lugar al primero de los módulos que son presenciales y con fuerte carga horaria, iniciando a las 8 am y finalizando alrededor de las 20 horas.  El mismo fue dictado por Jorge Leoz Salort, del Programa de Actualización en Negociación y Resolución Alternativa de Conflictos del Departamento de Posgrado de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, y participaron alrededor de treinta personas. Vale mencionar que la mediación funciona en la provincia de Santa Cruz a partir de una prueba piloto desarrollada en Río Gallegos, que, poniendo como protagonistas a las partes, fomentando la comunicación y el dialogo, logró evitar la litigiosidad en el sesenta por ciento de los casos que fueron derivados por juzgados de Familia.

POR RESOLUCIÓN DEL TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA. Se creó el Centro de Mediación judicial en Caleta Olivia 

El mismo es una extensión de la prueba piloto desarrollada con éxito en Río Gallegos, y se abocará a casos de Familia, como responsabilidad parental, cuidado personal o alimentos, entre otros.
Desde su implementación en la Secretaría Civil ante el Tribunal Superior de Justicia, más del 60% de las mediaciones de Familia se resuelven sin juicio, y de ese total, el 30% se realizan de forma remota. El dispositivo se creó en el año 2016 por una Acordada del máximo tribunal, para promover un espacio alternativo que baje la tensión en los litigios.Si bien el primer Centro de Mediación está ubicado en Río Gallegos, sus operadores y operadoras intervienen en conflictos del interior provincial, e incluso del resto del país, cuando la contraparte reside en Santa Cruz.
La novedad ahora es que desde el 27 de septiembre, también se habilitó de forma permanente en Caleta Olivia, cabeza de la segunda circunscripción judicial.Actualmente, existe gran interés en los métodos voluntarios para la resolución de conflictos, lo que se traduce en una fuerte demanda de mediaciones a distancia requeridas por otros Centros de Mediación de otras provincias con personas residentes en la ciudad de Caleta Olivia.En una primera etapa, el servicio se implementará en materia de familia, habida cuenta de lo previsto el Código Civil y Comercial de la Nación, en las causas que determine el juez o la jueza del Juzgado de Primera Instancia, en lo concerniente a la responsabilidad parental, en relación al cuidado personal, obligación alimentaria, régimen comunicacional y liquidación de la comunidad. En esta etapa, el Centro, que va a funcionar provisoriamente en el Juzgado Penal Juvenil (Hipólito Irigoyen N° 2245), va a permitir que el Juzgado de Familia pueda derivar las discrepancias a mediación, o que se realicen a pedido de alguna de las partes del expediente.   También actuará cuando sea requerida por Centros de Mediaciones u organismos de mediaciones de otras jurisdicciones.
En la Resolución que lleva las firmas de la presidenta del máximo tribunal santacruceño, Paula Ludueña, los vocales Daniel Mariani, Enrique Peretti y la vocal Reneé Fernández, quedó establecido que estarán al frente del dispositivo, las doctoras Alicia Mercedes De Rivas y Ana Lía Pérez Parnisari, bajo la coordinación de la secretaria Civil ante el TSJ, Marcela Ramos.